sábado, junio 26, 2010

Si me ves, chiflame




Ver lo grotezco, la exposición de cuerpos delineados, contorneados por horas de ejercicio, verlos explícitamente pierde misterio. ¿Es en ese momento que deberíamos sentirnos seducidos? Es por ello cuando descubrimos una señal en lo oculto de la cotidianeidad aparece el deseo, y ahí surge la timidez interna del cuerpo que se retrae. No es en ese espacio vedado donde hay que encontrar lo sexual, sino en lo que se muestra e impone para ser gozado, los espacios y tiempos perfectamente delimitados para controlar la sexualidad. Una sexualidad que hoy se define como libre, gozosa, fuera de restricciones sociales y clericales, pero que aún es totalmente controlada, nombrada, clasificada y clausurada en su significación, cercada por límites en un imaginario social compartido por acádemicos, sexólogos, psicólogos, medios de información entre otros.
No hay lenguaje para definir el deseo porque cuando lo nombro lo censuro, y si trato de mostrarlo con palabras se desvanece, sólo lo siento con el cuerpo, por eso es tan díficil traspasarlo a un razonamiento, y las mismas letras nos parecen insuficientes.
Cuando nos nazca el deseo, al rozar el cuerpo con un extraño, cuando una mirada profunda revele instinto, no es la duda e incertidumbre la que podría brotar sino el reconocernos deseados y deseosos por otros muchos. Puro calor humano, pura esencia.

domingo, junio 20, 2010

amor


La sensación de querer es algo que nace, me nace de algún espacio en mi cuerpo, en mi persona. Se dice que el amor se aprende, lo construye uno de pequeño. No lo sé cómo será que ocurre a nivel psicológico y corporal, lo que sí sé es que amar te hace sentir bien, muy bien. Decir, te quiero, un abrazo, no decir nada, estar al lado de un otro, sentir los cuerpos, despierta el deseo de seguir sintiendo eso.
Vuelve de algún modo, no importa el cuándo, ni el cómo sino que es un boomerang que te sorprende. Y decis pucha! entonces la existencia vale por esto.
Mi existencia vale por todos ellos, y es en esta época, en estos amores confirmados que si mi existencia se va, entonces valió por todo lo que sentí. De todos me queda su amor. Valgo por eso.